Por Héctor Trejo S. columnista de Radiografía Informativa.
De acuerdo con la Real Academia Española, el narcotráfico es el “comercio de drogas tóxicas en grandes cantidades”[1]. Esta actividad delictiva, consiste pues en producir, vender y en su caso distribuir narcóticos de diferentes tipos en las distintas sociedades.
Este negocio redondo, se ha convertido en una de las actividades ilícitas más redituables de todo el mundo, al grado de convertirse en un tema de especial relevancia para la sociedad y como fiel reflejo de la sociedad, que es, también para el cine.
Con este contexto, hoy quiero hablar de un documental que me agradó en prácticamente todos los sentidos, que por desgracia, no había tenido la dicha de verlo antes, me refiero a “Tierra de Cárteles” (2015).
El documental que retrata fielmente a la comunidad antagónica del narcotráfico, en el cual Matthew Heineman, director del mismo, se une a las filas de José Manuel Mireles, líder de las Autodefensas Mexicanas y a Tim Nailer Foley jefe de Arizona Border Recon (Reconocimiento Fronterizo de Arizona), organización cazamigrantes, convirtiéndose en una suerte de Salvador Toscano en la Revolución Mexicana (Memorias de un mexicano, 1949), al viajar con Mireles y su equipo a realizar detenciones de narcotraficantes y con Foley a capturar migrantes, que explica el estadounidense, son carne de cañón de los cárteles mexicanos.
El relato se centra en estos dos personajes esencialmente diferentes, pero con objetivos claramente similares, que buscan mejorar las condiciones de vida, cada uno del lado de la frontera que le tocó nacer.
Una cinta cuya dinámica argumental lleva al espectador a convertirse en automático, en un analista de la situación que viven sociedades como la nuestra en un entorno lleno de injusticia y donde sus protagonistas proponen la unión, la rebelión y las armas, como únicas alternativas para salir del yugo en el que nos tiene inmerso el crimen organizado.
El documental se mete hasta la cocina para darnos una descripción desmenuzada de la forma en que se integraron las Autodefensas y la forma en que se fueron permeando del crimen organizado e infiltrando de elementos impuestos por el gobierno para hacer caer su influencia.
Solo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected]
[1] [1] Real Academia Española. (2001). Diccionario de la lengua española (22.a ed.). Madrid, España: Autor.