Radiografía Informativa.- El Gobierno de la Ciudad de México, a través de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) en coordinación con la delegación Miguel Hidalgo, llevó a cabo la octava edición del Mercado del Trueque del año y tercera en dicha demarcación, donde los ciudadanos canjearon materiales reciclables como PET, vidrio, aluminio, papel, cartón y electrónicos, por productos agrícolas de la zona lacustre del Valle de México y semillas que se emplean desde la época precolombina, con motivo del “Día Mundial de Culturas Indígenas”.
La titular de la Sedema, Tanya Müller García, destacó que en esta edición se promovió la educación ambiental de separación de residuos, así como temas educativos y culturales.
“Las jornadas registran gran afluencia, es una gran experiencia tanto para adultos como para niños; en esta edición contamos con un stand del Museo de Historia Natural y actividades especiales sobre la alimentación precolombina, como el cacao, el amaranto y la chía”, señaló.
Por su parte, el jefe delegacional en Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo, resaltó que “esta iniciativa ha brindado a los habitantes de Miguel Hidalgo y del resto de las delegaciones, la oportunidad de aprovechar esta importante escuela de conciencia sobre la buena utilización de los desechos y el reciclaje, todo esto para ir cambiando el chip, ya que si no lo hacemos, no tendremos ocasión de alcanzar un estilo de vida sustentable”.
En ese sentido, Müller García destacó la importancia de llevar a las delegaciones los programas de la Sedema en materia de educación ambiental para crear conciencia sobre la importancia de separar residuos sólidos en el hogar; “que no solo sea la separación de lo orgánico e inorgánico, sino que la separación inorgánica sea más fina por parte de la ciudadanía. Es de gran importancia poder llevar a cabo estas acciones en conjunto con las delegaciones”.
El Mercado de Trueque se llevó a cabo en el marco del “Día Internacional de las Culturas Indígenas”, por lo que se desarrollaron actividades educativas dirigidas a rescatar el uso tradicional de las semillas como la chía, el amaranto, el cacao y la linaza como parte de la dieta diaria, así como sus valores nutricionales.
Para ello se intercambiaron pequeños paquetes, para que la gente siembre sus propias plantas y pueda cosechar las semillas que tuvieron una gran importancia en la dieta y cosmogonía precolombinas, así como la linaza, que fue traída por los españoles a América, donde su uso se extendió rápidamente.
En esta edición se intercambiaron ocho toneladas de productos locales de las zonas de Tláhuac, Milpa Alta y Xochimilco. En ocasiones anteriores en Miguel Hidalgo se han recolectado cerca de 17 mil 964 kilógramos de residuos, con una participación de más de tres mil ciudadanos.