Del total de tomas que existen en Edomex, al menos entre 10 y 20 por ciento son clandestinas.
Toluca, EdoMex.- La existencia de tomas clandestinas en la red de agua potable es un problema añejo en el Estado de México, por lo que el senador Higinio Martínez consideró que es necesario establecer acciones correctivas y preventivas para detectarlas, además de que se garantice el acceso al líquido vital a todos los habitantes, sin exclusión.
Señaló que el problema del agua en la metrópoli es uno de los mayores desafíos que se enfrentan, además de la explotación excesiva, por lo que es necesario garantizar una distribución de agua suficiente y con higiene para beneficio de los habitantes de la entidad.
Higinio Martínez subrayó que las tomas clandestinas de agua en la red hidráulica de los municipios es un problema recurrente y a la fecha no hay resultados concretos que resuelvan esta problemática, pues expertos han establecido que se pierde más líquido vital en fugas y tomas clandestinas que lo que aporta el Sistema Cutzamala.
También es necesario establecer acciones correctivas y preventivas, para detectar tomas clandestinas del vital líquido en el estado, principalmente en municipios metropolitanos del Valle de México, además de que se garantice el acceso al elemento a todos los habitantes, sin exclusión, dijo.
Alertó que de acuerdo con datos oficiales del total de tomas que existen en el Estado de México, al menos entre 10 y 20 por ciento son clandestinas.
Puntualizó que para habilitar una toma clandestina se requiere de pericia y conocimiento, debido a la presión del agua, por lo que supone que trabajadores o exempleados de organismos pueden estar coludidos.
En municipios metropolitanos, las cifras son alarmantes, pues se llegan a desperdiciar hasta 80 millones de litros de agua potable diariamente, que es similar al promedio estatal, mencionó el senador.
Con el fin de lograr un impacto importante en el manejo racional del líquido, es necesario recurrir al ahorro, reducir el consumo y eliminar fugas, pues cerca del 60 por ciento que se consume en el territorio no se factura, debido a tomas clandestinas, fugas en las redes hidráulicas, o por problemas de medición, refirió.
“También es necesario realizar un monitoreo permanente de la calidad del agua, es decir, el proceso continuo de observación, medición y análisis de parámetros que dan indicio de la calidad del agua, es un reto en el país y en el Estado de México, la entidad más poblada, ya que se requieren suficientes recursos humanos y económicos para poder llevarlo a cabo, finalizó Higinio Martínez.