Por Héctor Trejo S. columnista de Radiografía Informativa.
Siempre es un deleite ver en pantalla al genial Viggo Mortensen, eternamente lleno de sorpresas, de firmeza e intensidad. Interesante analizar el abismo de diferencia entre la gran mayoría de sus personajes, que sin embargo, mantienen el temple que ahora muestra en “Capitán Fantástico” (Captain Fantastic, 2016), dirigida por Matt Ross.
El filme raya en el límite entre lo sensato y absurdo, construyendo un relato lleno de elementos curiosos que se entrelazan con una realidad alterna, una familia sui generis, que devela detalles que por cotidianos, no identificamos a primera vista quienes vivimos en una gran ciudad.
La historia nos lleva a los bosques nutridos y distantes de los Estados Unidos, donde una familia vive en plena felicidad. Alejados de la civilización, su padre los educa, intentando imponer en ellos un sello de autenticidad y gran respeto ante su entorno, aunque la muerte de la madre obliga a los ermitaños a salir de su espacio vital e internarse en la selva de asfalto.
En la ciudad, tienen que enfrentar costumbres, tradiciones, métodos, educación y una familia llena de rencor hacia el padre, quien padece de muchas deficiencias, sobre todo en el plano legal, ring en el que tendrá que contender con Jack (Frank Langella).
Con estos elementos, el actor, director y guionista Matt Ross da vida a una ficción serena y rica en conceptos dignos de analizar. Llena de valores que permiten al espectador empaparse de ellos y por qué no, generarle sentimientos complejos como la incertidumbre, la fraternidad o el amor familiar.
La fotografía de Stephane Fontaine y la música de Alex Somers, van de la mano llevándonos a los espectadores por la vereda de emotividad que el director le impone a la historia, sin soltarnos hasta el final.
Sin duda alguna, una cinta digna de recomendación para todo público, en la que encontrará una gama interesante de emociones, aunque por momentos encontrará tenues similitudes con “Pequeña Miss Sunshine” (2007). La recomendación va acompañada de los laureles que recibió en el pasado Festival de Cine de Sundance, lo cual no es cosa fácil.
Solo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected] o regístrese en www.facebook.com/CinematografoCeroCuatro/ para recibir información del séptimo arte nacional e internacional.