Participaron alumnos y maestros de distintos talleres del Faro Texcoco, así como jóvenes músicos del programa ESEM
Texcoco, Edomex.- Bajo la sombra de una decena de sabinos de la comunidad de San Felipe, Texcoco, este domingo se llevó a cabo el primer Festival del Ahuehuete El viejo sabio, un encuentro que reunió a distintos artistas locales, asociaciones civiles y expertos en torno al cuidado y preservación de esta especie de la familia de las coníferas.
Previo a la inauguración oficial del festival, organizado por el H. Ayuntamiento de Texcoco, por medio de la Dirección de Cultura, autoridades auxiliares y el comisariado ejidal de San Felipe, así como ejidatarios de Santa Cruz de Abajo, se llevó a cabo una jornada de limpieza en la zona.
Esta acción, en la que participaron vecinos de la comunidad y miembros del colectivo Mira Tú, se realizó en el marco de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, una nueva agenda civilizatoria de la Organización de las Naciones Unidas.
Posteriormente se realizó una ceremonia prehispánica, coordinada por Roberto López Miranda, maestro de lengua náhuatl en la Fábrica de Artes y Oficios (Faro) Texcoco. Con caracoles, incensarios y otros instrumentos invitó a los asistentes a agradecer a las diferentes deidades de la cosmogonía prehispánica, que según la creencia se ubican en cada uno de los puntos cardinales.
En representación de Sandra Luz Falcón Venegas, presidenta municipal de Texcoco, la directora de Cultura del municipio, Rosana Espinosa Olivares, inauguró el primer Festival del Ahuehuete El viejo sabio, que invita a hacer conciencia sobre la preservación de nuestro patrimonio ambiental.
Espinosa Olivares subrayó la importancia de los ahuehuetes del ejido de San Felipe, a los que consideró como un tesoro para el disfrute de todos los texcocanos, quienes también tienen la obligación de protegerlos a través de distintas acciones, que van desde no tirar basura en la zona hasta participar en distintos proyectos comunitarios que tiene como fin dar a conocer la importancia ecológica, histórica y cultural de dichos árboles.
El encuentro continuó con la participación de una de las bandas sinfónicas del programa Escuelas de Enseñanza Musical (ESEM), en esta ocasión, conformada por niños de la comunidad La Magdalena Panoaya, Texcoco.
Bajo la batuta del maestro Humberto Méndez, los jóvenes intérpretes ofrecieron al público una adaptación del tema principal de la cinta Star Wars, el pasodoble El gato montés, el danzón Mariposa en la noche, la Marcha majestuosa y Viaje místico, entre otras.
Continuó la ponencia Anáhuac y los ahuehuetes, a cargo de la socióloga Laura Nayely Reyes. La también responsable del taller de Agricultura urbana, que se imparte en Faro Texcoco, invitó a través de su intervención a crear conciencia y cambiar nuestros hábitos alimenticios, además de nuestra relación con el planeta.
En su oportunidad, la doctora en Desarrollo rural, Beatriz Ramírez Meza, habló sobre un importante hallazgo realizado en marzo del 2000 en los ejidos de San Felipe. Se trata de los restos de un hombre que tras varios estudios arrojó información valiosa de cómo eran los habitantes de Texcoco hace miles de años, cuando los mamuts aún paseaban por la zona.
Expertos como Ernesto Sánchez Sánchez y David López Monroy compartieron también sus conocimientos con el público. Versaron sobre el papel de los ahuehuetes en la región y su especial relación con el tlatoani Nezahualcóyotl, quien plantó muchos de estos árboles en Texcoco, incluso, desvió varios ríos para proveerlos de agua.
El grupo Divinum Tragedy, integrado por dos jóvenes chelistas y un percusionista, formaron también parte del programa. Con piezas originales enmarcadas en el metal sinfónico provocaron los aplausos del público.
Para cerrar el primer Festival del Ahuehuete El viejo sabio se llevó a cabo la pasarela Cuerpos pintados, una actividad del taller de Body paint, impartido por Alejandro Durán Nava en el Faro Texcoco. Siete practicantes de este arte mostraron sus mejores diseños en la piel de jóvenes modelos, quienes a manera de lienzo dieron cuenta de la naturaleza y el imaginario mexicano.