De “Talía Machetes” a “Talía Fifí”, la traición a morena y el “agandalle” con el PT en Atenco.

Atenco, EdoMex.- La alcaldesa con licencia y actual candidata del PT a la presidencia municipal de Atenco, Talía Citlali, ha pasado por una serie de desaciertos que le costaron la reelección bajo las siglas del partido que le dio la oportunidad de participar por un puesto de elección popular por primera vez en su vida, aunque debido a la falta de resultados, Morena le retiró la confianza y tuvo que buscar refugio en el Partido del Trabajo.

Recordemos que si bien todavía no había tomado protesta como presidenta municipal y la gente la bautizó como “Talía Machetes”, debido a que emanó del digno movimiento del Frente de Pueblos Defensores de la Tierra, mejor conocidos como los “macheteros de Atenco”.

Apenas habia comenzado su periodo como presidenta municipal, y el apodo de la alcaldesa cambió por “Talía Fifí” debido al desdén con el que atendía a la gente humilde y la cerrazon de su gobierno a temas sociales sensibles; apodo que cobraría fuerza cuando salió a la luz que percibe un sueldo antes de impuestos de más de 90,000 pesos mensuales, según se dio a conocer en este medio en el año 2022.

Así pasaron mas de 2 años de su gobierno, con más pena que gloria, hasta que llegó el día en que se definirían las candidaturas para la eleccion del proximo 2 de junio y “Talía Fifí” juntos con sus secuases del gobierno municipal se relamían los bigotes ante una anunciada reelección municipal.

Sin embargo, el comité municipal de morena en Atenco “tenía otros datos”, y debido a su pésima gestión al frente del ayuntamiento,  decidieron que la candidatura sería para su ex esposo César del Valle.

Sin importarle sus principios, ideales, ni lealtades, “Talía Fifí” corrió a buscar refugio en el PT, donde obtuvo la candidatura sin miramientos, sin remordimientos ante la traición a morena, partido que le dio la oportunidad de pasar de ser una completa desconocida a llevar las riendas de la hacienda pública del municipio.

Como era de esperarse, la gente le dio la espalda, “sus regidores” se volvieron en su contra, y entregó un municipio sin gobernabilidad, un cochinero, donde dejó a más de 400 trabajadores del ayuntamiento sin poder cobrar con tal de contender nuevamente en las elecciones y vivir 3 años más del erario público.

Finalmente, dicen propios y extraños, Talía se agandalló al Partido del Trabajo, dejando fuera a militantes de toda la vida, gente que ha entregado su alma al PT y hoy pierden la oportunidad de encabezar la candidatura por el capricho de una advenediza.

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