Tecámac, Edomex.- En solidaridad con Zunduri, la joven que fue esclavizada laboralmente durante más de cinco años en una planchaduría en el Distrito Federal, el gobernador Eruviel Ávila le entregó una vivienda amueblada para que ella y su familia cuenten con mejores condiciones de vida y puedan escribir su propia historia de éxito, en una atmósfera de tranquilidad, armonía y libertad.
El titular del Ejecutivo estatal indicó que las autoridades de todos los niveles de gobierno y la sociedad deben estar unidos para erradicar esta problemática y generar condiciones de vida dignas a favor de quienes hayan sufrido por este motivo. Dijo que personalmente estará al pendiente de la situación de esta joven, a quien instó a retomar sus estudios y alcanzar sus metas personales. Además, comentó que la administración estatal se sumará a la declaratoria contra la trata que promueve el Papa Francisco, a través de la Academia Pontificia, y la cual fue firmada por 70 alcaldes del país, durante un evento sobre el Cambio Climático y la Esclavitud, realizado en El Vaticano.
Asimismo, Eruviel Ávila reconoció el trabajo que lleva cabo la Comisión Unidos contra la Trata, para combatir este mal y por vincular a las víctimas con instancias públicas o privadas, donde se les otorga una atención integral para que puedan retomar su vida. A su vez, Zunduri agradeció el apoyo por parte del gobernador y pidió que las autoridades y la sociedad en México luchen por erradicar este delito, y aseguró que luego de recibir ayuda psicológica y ahora una vivienda, se ha trazado la meta de comenzar una nueva vida y unirse al combate contra la llamada esclavitud del siglo XXI.
Por su parte, Rosi Orozco, activista y presidenta de la Comisión Unidos contra la Trata de Personas, dijo que el apoyo de las autoridades es fundamental para que las víctimas de trata puedan retomar una vida digna, por lo que agradeció al gobernador mexiquense tener la sensibilidad de apoyar a Zunduri, pues ella sólo necesita una oportunidad para salir adelante. Como se recordara, la joven estuvo esclavizada más de cinco años en una planchaduría de Tlalpan en el Distrito Federal, de los cuales, 8 meses la pasó encadenada hasta que encontró la forma de liberarse de sus agresores, que se encuentran en prisión.