Radiografía Informativa.- Imágenes de cámaras de seguridad del banco y declaraciones de ofendidos aportados por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, permitieron al Tribunal Superior de Justicia capitalino, confirmar la pena impuesta a un sujeto que laboraba como cajero de una institución bancaria y daba información a sus cómplices sobre los clientes que retiraban efectivo para que los asaltaran.
En la toca 432/2014, la Subprocuraduría de Procesos presentó agravios que estudiaron Magistrados de la Tercera Sala Penal, para ratificar la pena impuesta a Daniel Ortiz Montero.
El pasado 20 de febrero de 2014, este sujeto fue sentenciado a 14 años y tres meses de prisión, así como el pago de un millón 267 mil 294 pesos, de reparación del daño.
Por la comisión del delito de robo calificado en pandilla, Daniel Ortiz recibió dicha pena en el juzgado 38 Penal, del Reclusorio Preventivo Norte, bajo la causa penal 314/2012.
ANTECEDENTES
Durante el juicio, el Ministerio Público demostró que el ahora sentenciado laboraba como cajero de una sucursal bancaria, localizada en Calzada de la Viga, colonia Santa Anita, delegación Iztacalco.
Aprovechando su cargo, el sujeto daba señales a sus cómplices, tocándose una oreja, para que siguieran a las víctimas que cambiaban cheques y asaltarlas.
Se estableció que el 17 de agosto de 2012, una de las víctimas retiró una fuerte cantidad de dinero y fue atendida por Daniel Ortiz, quien gritó en dos ocasiones salida de efectivo.
El afectado fue interceptado por dos sujetos en Avenida Congreso de la Unión, delegación Iztacalco, quienes identificaron plenamente donde traía el dinero para robárselo.
El 20 de noviembre del mismo año, otro denunciante acudió a la sucursal bancaria donde depositaría una fuerte cantidad de dinero. Al saber la cantidad que iba a entregar el cliente, Ortiz Montero se tocó en varias ocasiones uno de los oídos, señal que dio a sus cómplices quienes asaltaron al ofendido dentro de la institución.
Personal del banco señaló que el sujeto incumplió protocolos de emergencia, como es la activación de los sistemas de alarma con los que cuentan las sucursales.