Por Héctor Trejo S. columnista de Radiografía Informativa.
Una secuencia de “Un viaje de diez metros” da vueltas en mi mente desde que salí de la sala: el chef cocina frente a la dama madura, que se encuentra completamente hipnotizada por la forma en que se está modificando una receta casi tradicional, acto reflejo, ella le pregunta por qué cambiar una receta de 200 años y el chef responde “quizás 200 años sean suficientes”.
Con esa dinámica de rompimiento de lo convencional, el director Lasse Hallström recurre a una historia plagada de sabores visuales y sentimientos gastronómicos que trasgreden fronteras y modifican lo establecido, para beneplácito visual y argumental, de quienes hemos tenido la oportunidad de disfrutarla en la pantalla grande.
El trabajo histriónico de Helen Mirren y Manish Dayal, nos introduce en ese mundo en el que la cocina asiática penetra en un mundo europeo prácticamente cerrado por costumbres y tradiciones y lo llena de vivacidad y color, aunque también de sabores contrastantes y por lo tanto de nuevos elementos sociales.
La cinta narra la supuesta confrontación en la que se enfrascan dos restaurantes, uno francés y uno indio, que ha sido abierto muy reciente mente y con gran éxito. La distancia entre los dos es de apenas “Diez metros” y la batalla entre los dos establecimientos se convierte en un conflicto de sentimientos que van de la mano con la mezcla de sabores tradicionales de la comida francesa y la india.
Uno de los aspectos sobresalientes con que cuenta la película es la producción del Rey Midas de la cinematografía moderna, Steven Spielberg quien apuesta por una historia diferente, aunque nos hace recordar a cintas como “La vendedora de especias” o “Chocolat”.
Una cinta que vale la pena paladear al lado de los amigos y por lo tanto, sumamente recomendable, que seguramente le dejará un buen sabor de boca y será motivo de una buena charla posterior al cine, en un buen restaurante, buscando saborear alguno de los platillos que nos contaron en el filme.
Solo le recuerdo que la imaginación se disfruta más en la oscuridad del cine, así que no deje de asistir a su sala favorita. Para dudas, comentarios o sugerencias escríbame al correo electrónico [email protected] o ingrese al sitio web www.inter-medios.jimdo.com