Radiografía Informativa.- Rebelde e inconforme son dos palabras frecuentes en toda biografía que de Yayoi Kusama (Matsumoto, Japón, 1929) se escribe. La obra de quien es considerada como la artista viva más prominente de Japón llega por primera vez a México a través de una retrospectiva titulada Yayoi Kusama. Obsesión infinita, que abrirá el Museo Tamayo Arte Contemporáneo a partir del 26 de septiembre.
“Es una artista muy significativa que tuvo contacto e incluso influencia sobre Andy Warhol”, señaló el presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Rafael Tovar y de Teresa, al encabezar un recorrido por esta muestra, acompañado por María Cristina García Cepeda, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes; David Cohen Sitton, presidente de la Fundación Olga y Rufino Tamayo; y Carmen Cuenca, directora del Museo Tamayo.
Al ser entrevistado los representantes de los medios de comunicación que acudieron al recorrido por la exposición Yayoi Kusama. Obsesión infinita indicó, el titular del Conaculta, Rafael Tovar y de Teresa, señaló que esta muestra se inscribe en la serie de exhibiciones que la institución ha organizado en México y en el exterior, en el primer caso, se refirió a las de En esto ver aquello. Octavio Paz y el arte; Angelelogía. Utopía y ángeles, de Ilya e Emilia Kabakov; Códices, memorias y saberes; 50 años, 50 obras, y Pedro Ramírez Vázquez. Inédito y funcional.
Estas exposiciones forman parte del programa general de trabajo del Conaculta y los cientos de miles de personas que las han visto en México y en el mundo son resultados positivos del mismo, expresó Rafael Tovar y de Teresa.
Obsesión infinita es la primera retrospectiva de la obra de Yayoi Kusama que se presenta en América Latina. Tras itinerar por recintos de Brasil y Argentina la muestra llega a México para ofrecer un recorrido amplio del trabajo de esta artista, a través de más de un centenar de piezas que abarcan de 1950 a 2013, incluyendo pinturas, obras en papel, esculturas, videos, presentaciones con diapositivas e instalaciones.
“Estamos frente a una visión de las artes visuales que viene del Continente Asiático, de una nacionalidad que empieza a tomar una gran plenitud en la universalidad de sus expresiones contemporáneas, que es Japón, y de una artista que por su propia personalidad, recluida por decisión propia desde 1977 bajo cuidados médicos psicológicos, no ha dejado de seguir creando”, expuso el presidente del Conaculta.
La curaduría de la muestra estuvo a cargo de Frances Morris y Philip Larrat-Smith, quienes plantearon ofrecer un reflejo de la carrera artística de Yayoi Kusama que cuenta con obras tan representativas como lo son sus Infinity Nets, así como la película Kusama’s Self-Obliteration, registros de sus happenings Love-in Festival y Flower Orgy, las esperadas instalaciones Phalli’s Field, I’m here but nothing, Obliteration Room y elInfinity Mirror Room, culminando con obra inédita producida en 2013.
La directora general del INBA, María Cristina García Cepeda, señaló que con esta exposición el Museo Tamayo reitera y consolida su posición para estar en la vanguardia del arte contemporáneo.
Frances Morris, cocuradora de la exposición, explicó durante el recorrido que Yayoi Kusama es una artista que se encuentra siempre al centro de su trabajo. “Su origen es rural, crece en una familia de buenos ingresos en Japón que se dedicaba al comercio de semillas. Ella nació y creció en la época en que Japón entra a la Segunda Guerra Mundial. Desde muy joven expresaba que tenía alucinaciones, en algunas ocasiones se refiere a ellas como un mundo de puntos y en otras como una especie de red”.
Recordó además que Kusama viajo a Nueva York en 1957 y ahí conoció a personajes como Donald Judd, Andy Warhol y Joseph Cornell. De la práctica pictórica pasó a las esculturas blandas conocidas como Accumulations(Acumulaciones) y luego a performances en vivo y happenings, claros exponentes de la cultura alternativa neoyorquina con los que ganó reconocimiento y notoriedad en la escena artística local.
En 1973, Yayoi Kusama volvió a Japón, y en 1977 se internó voluntariamente en una clínica psiquiátrica, en la que reside desde entonces. A la marcada peculiaridad psicológica de su obra, se suma un amplio espectro de innovaciones formales y reinvenciones que le permiten a la artista compartir con un público amplio su singular visión, a través de los infinitos espacios espejeados y las superficies obsesivamente cubiertas de puntos que le han dado fama internacional. En su obra más reciente, la artista ha retomado sus instintos más radicales a través de instalaciones de inmersión y piezas de colaboración que la han convertido en la artista viva más aplaudida de Japón.
La muestra Yayoi Kusama. Obsesión infinita, abrirá sus puertas al público el 26 de septiembre y permanecerá en exhibición hasta el 18 de enero de 2015 en el Museo Tamayo Arte Contemporáneo. Habrá horarios extendidos para público general, así como visitas programadas. Los detalles de la exposición pueden consultarse en www.museotamayo.org.